El primer grupo de 41 estudiantes visitó las catacumbas del Convento San Francisco de Asís, donde además de conocer un poco de la historia de la capital, tuvieron acceso a información sobre algunos de los postres más tradicionales de nuestro país, como el ranfañote y el champú. Luego se trasladaron a la alameda de Chabuca Granda para degustar picarones y anticuchos, y conocer la forma de preparación utilizada por las cocineras del lugar.
Los 23 estudiantes de la otra delegación visitaron el Mercado #1 de Surquillo para conocer la diversidad de insumos y su correcta selección, también el restaurante Tío Mario para probar sus anticuchos y picarones, el puerto pesquero del Callao para aprender sobre la elección y beneficios de pescados y mariscos, y el restaurante de cuatro tenedores Don Julián, donde reconocieron las buenas prácticas del servicio en espacios de esta categoría.
Ambos grupos también visitaron la feria gastronómica Mistura con el fin de ver la diversidad de platos y presentaciones de las diferentes regiones participantes. «La idea es que los chicos tengan contacto directo con los productores, cocineros y restaurantes, y aprendan sobre presentaciones mercado abierto, estudio de mercado y logren generar contactos», informó Patricia Velazco.